La reunión en Camp David de los lideres del G-8 -EEUU, Rusia, Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Japón- analizaron la grave e inestable situación de la eurozona expresando el interés común por la permanencia de Grecia en la UEM.
Expresaron sus deseos de mantener el crecimiento, la estabilidad y la confianza en la Eurozona e implementar la consolidación fiscal.
Obama y Merkel tienen prevista una reunión bilateral posterior para comentar soluciones al crecimiento económico.
Merkel, Monti y Hollande acuerdan una reunión en Roma para Junio.
El coste de la salida griega:
Francia y Alemania: 56.000 millones de euros y 786 millones para la banca española.